viernes, 11 de diciembre de 2009

Lo bueno si breve, dos veces bueno

Amenazas

-Sos muy fea - Dijo la pantera
-Vos tenes olor a pata - Dijo la espada
-Te devorare - Dijo la pantera
-Peor para ti - Dijo la espada


Pájaros

- Los pajarons buscaban un hogar
- Los cazadores buscaban pajaros
- Las ramas se poblaron de pajaros
- Sono un disparo y el arbol cayo pesadamente

martes, 8 de diciembre de 2009

Escritura autobiográfica (Segunda parte) - Marcos Silva

Pasábamos nuestras vacaciones en familia en las Sierras de Córdoba , los días eran calurosos y largos. Estábamos cerca de un río verdaderamente hermoso, con muchas piedras y agua muy transparente. Una tarde muy calurosa fuimos a refrescarnos y quise aprender a tirarme de cabeza , mi papa me había dicho que tuviera cuidado, que era muy chico y el río tenía muchas piedras...pero… un poco cabeza dura…me tiré!
Había comenzado a practicar y me di cuenta de lo difícil que era, decidí entonces quedarme todo un día entero practicando hasta que me saliera. Cuando empecé a hacerlo bien , decidí mostéaselo a mi papa rápidamente, mi papa quiso ver y yo de apurado para mostrarle que me salía, me tire sin mirar, caí al agua y sentía que no podía nadar y me hundía, sentía pesado mi cuerpo, no me podía mover, tampoco me era necesario poder respirar, todo era muy raro. En un abrir y cerrar de ojos apareció un pez enorme mirándome y diciéndome que lo siga, cuando me habló no lo podía creer y me preguntaba mi mismo que como un pescado podía hablar. Comencé a seguirlo, parecía que me quería mostrar algo y yo impacientemente le preguntaba donde íbamos; el me decía ya casi llegamos y me mantuvo con esas tres palabras como 1 km. Por fin llegamos, el pez se dio vuelta, me miró y yo no lo podía creer… me había traído a un mundo nuevo donde todo era raro, la gente tenia cabeza de pescado y todos podían hablar, yo muy asombrado empecé a caminar por todos lados para conocer este maravilloso lugar, todo era muy hermoso.
Pase todo el día en ese lugar tan bello hasta que caminando por la playa veo dos personas llamándome, al ver quienes eran me asusté! Eran mi papá y mi mamá con cabeza de pescado, cuando vi eso me asombré y me asusté tanto que abrí los ojos y estaba mi papá al lado mío diciéndome :-¡Marcos como te vas a tirar al agua así! ¡sin mirar! ¿ no viste que te tiraste a las piedras y te golpeaste…?
Desde que sucedió esto cada vez que me meto en un río me sumerjo bajo el agua y espero que vuelva el pez que me guió hasta ese mundo.